Mario Bernaola cuelga el silbato tras más de 450 encuentros en División de Honor

Un remate de Moisés Cézar ponía el cierre al segundo encuentro de la final de la Superliga Masculina, un punto histórico para CV Guaguas y también para la carrera de Mario Bernaola. El árbitro de Albuixech se despedía del arbitraje tras más de 450 encuentros en la División de Honor, en 23 temporadas en la élite del voleibol nacional, tanto en la pista como en la arena. 

Unos comienzos en la Comunidad Valenciana que le llevaron con rapidez a debutar en la máxima categoría del vóley nacional, y con posterioridad a iniciar una carrera internacional que se alargó por 18 cursos, los últimos cinco dentro de la máxima categoría de la FIVB. Una imagen de Mario Bernaola es además la que abre la sección de Señales arbitrales en la web de la Federación Internacional. 

El valenciano, aunque llego tarde al arbitraje, a la edad de 28 años, pudo compaginar su pasión por el voleibol con sus labores dentro del Ejército del Aire, donde ostenta el rango de Subteniente. Una carrera militar que como él mismo reconocía en el “Somosmasquevoley”, me llevó a ser un “árbitro muy marcial, además proveniente del fútbol y luego en el vóley… Vamos, no me tosía absolutamente nadie”. 

Su larga trayectoria en el vóley nacional le ha permitido dirigir numerosas finales de Superliga Masculina, Liga Iberdrola y Copas del Rey y Reina, unos hitos que han tenido su correlación en el ámbito internacional con más de 280 partidos internacionales y su presencia en 5 Campeonatos del Mundo, los dos últimos en 2018 en el Campeonato del Mundo Masculino de Clubes disputado en Polonia y el Campeonato del Mundo Femenino, además de Campeonatos de Europa, Copa de África, Grand Prix y distintas ediciones de la World League y la Volleyball Nations League. Unas actuaciones que reconocía ser “un honor. Poder representar al voleibol nacional y al arbitraje español es una gran oportunidad para dejar la mejor marca de nuestro deporte”

Su pasión por la enseñanza le ha llevado a ser instructor de numerosos cursos para nuevos árbitros en la Comunidad Valenciana, además de ser profesor del Curso de Entrenador de Nivel 3 en varias ediciones, y realizando labores de coordinación de designaciones arbitrales en el CTNA desde el pasado mes de enero. 

Reconocido y admirado por sus cualidades, junto a su “experiencia, más tranquilo y pausado, y mejor conocedor y entendedor de las personas” dos de las habilidades esenciales para Mario Bernaola para ser un gran árbitro. 

La labor del valenciano ha sido reconocida por los clubes de la máxima competición nacional en sus últimos encuentros. En los cuartos de final de la Superliga Masculina, Unicaja Costa de Almería le hizo entrega de un obsequio en reconocimiento a su trayectoria, al igual que ocurriera este domingo, en los prolegómenos de su último partido desde la silla, cuando Moisés Cézar e Ignacio Sánchez, capitanes de CV Guaguas y Unicaja Costa de Almería le hicieron entrega de una camiseta del conjunto grancanario firmada por los jugadores de ambos equipos. 

Mezclando su profesión y su pasión por el voleibol, Mario Bernaola pudo disfrutar de una de sus mejores experiencias en el Chad, una experiencia que es mejor escuchar de su propia voz en el siguiente vídeo.